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La web te mantendrá con vida después de muerto

¿Qué ocurre con la información digital de un cibernauta que fallece? En el caso de algunos servicios de correo, como Hotmail y Yahoo!, las cuentas expiran tras cierto tiempo de inactividad.

Cuando una persona muere, los familiares pueden pedir la eliminación de los datos o efectuar un homenaje en su memoria en la misma cuenta digital...(más)

Esto se aplica en las redes sociales. Por ejemplo, la comunidad Twitter brinda el servicio de eliminar la cuenta después de enviar la solicitud a la dirección: privacy@twitter.com.
Si el familiar fallecido era miembro de Facebook, hay que llenar un documento en el cual se debe demostrar cierta cercanía con el difunto e incluir una partida de defunción virtual. El formulario está disponible en: http://on.fb.me/y2CcC. 

Aunque muchos cumplen estos y otros requisitos no siempre logran la eliminación de los datos. El caso más conocido, divulgado por la prensa internacional, es el de Stephanie Bemister, quien reportó la muerte de su hermano fallecido en el 2008.
Ella envió un e-mail a Facebook con el certificado de defunción y los motivos para que borraran la cuenta. Solo recibió como respuesta la política para difuntos de la red social. 
Solo cuando la noticia generó revuelo, Facebook accedió a eliminar la información.
David Castro comenta que un amigo de la infancia falleció hace más de dos años y su perfil continúa en la Red. Dice que todavía hay muchas personas que escriben en su muro, como si aún continuara con vida. 


En las comunidades sociales, los perfiles funcionan con una contraseña que solo su propietario conoce y es la única persona que puede desactivarlo. 
Por esta razón, se torna imposible solicitar al sitio web la clave de acceso para eliminar la información. El compromiso de estas páginas es no revelar nunca las claves y este va más allá de la muerte del titular de la cuenta. 
Ricardo Ortega, especialista en seguridad informática, explica que los datos digitales seguirán vivos por muchos años, “al gusto del administrador del sitio web”. Advierte que algunos portales permiten dar de baja las cuentas, solo después de cumplir estrictos procedimientos. 


Este experto indica que la información que se pone en Internet ya no le pertenece al usuario, sino al administrador del sitio donde esta se colocó. 
Para Fernando Carpio, ingeniero en Sistemas, los datos no desaparecen Él dice que las cuentas de correo tampoco. “Una vez abrí una cuenta en Hotmail y no la usé. Después de un par de años ingresé y se restableció con todos mis datos”.

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